El obispo de Bariloche, Fernando Maletti, dijo no entender ni reconocer los "presuntos" cuestionamientos contra su par de Neuquén, Marcelo Melani, y expresó la "compañía muy fuerte, muy grande y muy total" de la diócesis cordillerana.
El obispado neuquino recibiría en los próximos días un enviado del Vaticano que tendrá la misión de evaluar el conflicto desatado en esa diócesis por denuncias anónimas contra su titular. En lo formal, Melani fue acusado de permitir "abusos litúrgicos" e "imprecisiones teológicas" entre sus sacerdotes.
Aunque esta semana trascendió -en un canal nacional de noticias- que las principales objeciones estarían relacionadas con su apoyo a los paros docentes y sus manifestaciones en contra del ex gobernador Jorge Sobisch.
Consultado el obispo de Bariloche señaló que "nosotros apreciamos mucho a monseñor Melani y estos presuntos cuestionamientos que le haría un grupo de personas no los entendemos, no los reconocemos, de tal manera que nuestra compañía con monseñor Melani es muy fuerte, muy grande, muy total". Maletti dijo desconocer el origen de las denuncias sobre formuladas contra su par. "Hay personas que tienen la posibilidad de dirigirse a quien sea y se supone que habrá sido así, pero uno no sabe de donde vienen porque son cosas que se hacen con la discreción del caso" explicó.
También le restó trascendencia al pedido de renuncia que le habría formulado el cardenal Giovanni Battista Re en marzo pasado, en oportunidad de la visita al Vaticano. "Actualmente monseñor Melani es el obispo de Neuquén y sigue como tal, hasta que no se haga oficial una solicitud de dar un paso al costado no hay porque darlo" sostuvo Maletti. Entre los "abusos litúrgicos" cuestionados a Melani se mencionan faltas a disposiciones del ritual de las ceremonias religiosas, como que los sacerdotes no se revistan debidamente, la inclusión de laicos para la distribución de la comunión o la consagración de panes en lugar de hostias. La principal objeción formal pasa por la reducción de las diferencias entre la jerarquía y feligresía.
El obispado neuquino recibiría en los próximos días un enviado del Vaticano que tendrá la misión de evaluar el conflicto desatado en esa diócesis por denuncias anónimas contra su titular. En lo formal, Melani fue acusado de permitir "abusos litúrgicos" e "imprecisiones teológicas" entre sus sacerdotes.
Aunque esta semana trascendió -en un canal nacional de noticias- que las principales objeciones estarían relacionadas con su apoyo a los paros docentes y sus manifestaciones en contra del ex gobernador Jorge Sobisch.
Consultado el obispo de Bariloche señaló que "nosotros apreciamos mucho a monseñor Melani y estos presuntos cuestionamientos que le haría un grupo de personas no los entendemos, no los reconocemos, de tal manera que nuestra compañía con monseñor Melani es muy fuerte, muy grande, muy total". Maletti dijo desconocer el origen de las denuncias sobre formuladas contra su par. "Hay personas que tienen la posibilidad de dirigirse a quien sea y se supone que habrá sido así, pero uno no sabe de donde vienen porque son cosas que se hacen con la discreción del caso" explicó.
También le restó trascendencia al pedido de renuncia que le habría formulado el cardenal Giovanni Battista Re en marzo pasado, en oportunidad de la visita al Vaticano. "Actualmente monseñor Melani es el obispo de Neuquén y sigue como tal, hasta que no se haga oficial una solicitud de dar un paso al costado no hay porque darlo" sostuvo Maletti. Entre los "abusos litúrgicos" cuestionados a Melani se mencionan faltas a disposiciones del ritual de las ceremonias religiosas, como que los sacerdotes no se revistan debidamente, la inclusión de laicos para la distribución de la comunión o la consagración de panes en lugar de hostias. La principal objeción formal pasa por la reducción de las diferencias entre la jerarquía y feligresía.
Adelante
Muchos Más Artículos
INICIO
No hay comentarios:
Publicar un comentario