Comentario Seglar al evangelio del domingo 7 de junio, Santísima Trinidad

Publicado por Ciudad Redonda

DESDE LA EDUCACIÓN DE LOS HIJOS
(matrimonio, él trabaja, con cinco hijos, pertenecen a comunidad cristiana de matrimonios)
Una de las primeras cosas que solemos enseñar a los niños, aparte del Jesusito de mi vida o el cuatro esquinitas, es hacer la Señal de la Cruz: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Al principio no saben qué significa y se lían con el hombro derecho o el izquierdo. Luego aprenden que empezamos cualquier oración o la misa con ella, entienden que es muy importante. Dios Padre que ha creado todas las cosas, Dios Hijo que con su amor nos ha salvado, Dios Espíritu Santo que nos da su fuerza para repartir ese amor a los hermanos. Dios Jesús que está siempre con nosotros, en la Eucaristía, en la Biblia, en los demás, en medio de nosotros, en nuestro corazón.


DESDE EL TRABAJO
(matrimonio, ambos empleados de empresa; pertenecen a comunidad cristiana)
En este Evangelio Jesús nos trae al recuerdo el bautismo, les pide a sus discípulos que bauticen, nos lo pide. Quizás no nos pida que hagamos el rito pero sí que nos mostremos abiertamente cristianos, que nos hermanemos con los que nos rodean, que demos vida y alegría.
Aplicándolo al trabajo Jesús nos pide que no seamos un trabajador independiente y aislado sino que seamos hermanos de nuestros compañeros, que trabajemos codo con codo con ellos y seamos partícipes de sus problemas formando un auténtico equipo.
Te pido, Jesús, que renueves nuestro bautismo para que en estos tiempos de crisis económica y laboral seamos transmisores de tu felicidad.


PARA REZAR
(hombre, casado, trabaja, con un hijo)

Que no vacile mi ánimo, ni se acobarden mis intenciones...
Que vea con claridad tu rostro, y tu voz no se pierda en el ruido de mi mundo...
Que encuentre la paz de sentirte conmigo...
Dame la Fuerza de seguir tu Mensaje...
Que no me fíe de mi capacidad sino de tu manera de quererme...
Sencillo, sereno, confiado... me postro firme ante Ti, para decirte:
Señor, mío y Dios, mío... que tu Espíritu me acompañe, que tu Luz me guíe...
Que el mundo te vea en mis pasos por obra de tu Amor.