Publicado por Entra y Verás
¿Cómo te ves? Vamos, hazte una radiografía rápida. Traza tu perfil en todos los ámbitos: físico, psíquico, laboral, familiar… deteniéndote en aquello que no te agrada del todo.
Este mes te proponemos un reto: Intenta cambiar lo que te incomoda. No te asustes, no tienes que terminarlo el día 29. Sería un buen resultado si lograses detectar lo por cambiar y esbozar algunas estrategias para hacer tu vida más agradable.
Casi al final del mes, el día 22, comenzará la Cuaresma. Todavía tendremos siete días por delante para acabar de trazar un plan que desemboque en la felicidad.
En el fondo de lo que proponemos en este mes está una palabra que algunos llena de ilusión y otros les llena el horizonte de negros nubarrones como si se tratase de renunciar por sistema a todo lo que nos hace felices. Hablar de conversión no significa vestirnos de negro riguroso mientras nos sentimos un saco de limitaciones; sino encarar con energía e ilusión un proceso en el que intentar cambiar todo lo que nos incomoda. No es bueno quedarse en la piel hay que perder el miedo a nosotros mismos para poder conseguir transformar lo que nos disgusta.
Te facilitamos algunas pistas:
- Afronta la vida en su complejidad sin buscar atajos ni alimentar el miedo.
- Ama a los otros con corazón sincero sin esperar sacar beneficio de su cercanía.
- Aprende a mirar un poco más allá de tu mundo.
- Atrévete a soñar en un mundo mejor convencido de poder hacer realidad ese sueño
- Acepta que la clave de este proceso no está únicamente en tus manos sino que los verdaderos frutos llegan cuando eres capaz de ponerte en manos de Dios.
Roberto Sayalero Sanz, agustino recoleto. Colegio San Agustín (Valladolid, España)
Este mes te proponemos un reto: Intenta cambiar lo que te incomoda. No te asustes, no tienes que terminarlo el día 29. Sería un buen resultado si lograses detectar lo por cambiar y esbozar algunas estrategias para hacer tu vida más agradable.
Casi al final del mes, el día 22, comenzará la Cuaresma. Todavía tendremos siete días por delante para acabar de trazar un plan que desemboque en la felicidad.
En el fondo de lo que proponemos en este mes está una palabra que algunos llena de ilusión y otros les llena el horizonte de negros nubarrones como si se tratase de renunciar por sistema a todo lo que nos hace felices. Hablar de conversión no significa vestirnos de negro riguroso mientras nos sentimos un saco de limitaciones; sino encarar con energía e ilusión un proceso en el que intentar cambiar todo lo que nos incomoda. No es bueno quedarse en la piel hay que perder el miedo a nosotros mismos para poder conseguir transformar lo que nos disgusta.
Te facilitamos algunas pistas:
- Afronta la vida en su complejidad sin buscar atajos ni alimentar el miedo.
- Ama a los otros con corazón sincero sin esperar sacar beneficio de su cercanía.
- Aprende a mirar un poco más allá de tu mundo.
- Atrévete a soñar en un mundo mejor convencido de poder hacer realidad ese sueño
- Acepta que la clave de este proceso no está únicamente en tus manos sino que los verdaderos frutos llegan cuando eres capaz de ponerte en manos de Dios.
Roberto Sayalero Sanz, agustino recoleto. Colegio San Agustín (Valladolid, España)
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