Por fr. Julián Riquelme, op
Mt 19,30-20,16
a) Contexto
En la parábola de los "trabajadores de la viña", los de la primera hora son los dirigentes judíos del tiempo de Jesús. Ellos piensan que, con su pueblo, son los únicos beneficiarios de las promesas divinas hechas a Abraham y de la Alianza celebrada entre Dios y Moisés. Quienes no cumplen las leyes mosaicas y los extranjeros quedan excluidos de estos privilegios.
En el mismo trozo del Evangelio, los operarios de la última hora son los pecadores y los paganos. Jesús trata con ellos, pues desea que palpen la bondad soberana de Dios Padre.
Esta actitud de Cristo causa escándalo, conflictos y murmuraciones entre los fariseos y los maestros de la ley. Se llenan de envidia y rabia, porque la gente sigue al Señor. Sus malos ojos y el rencor los impulsarán un día a crucificar a Jesús.
b) Contenido
La parábola está construida con cuatro imágenes ilustrativas:
• La autoridad soberana del dueño de la viña. El dueño representa a Dios; el capataz es figura de Cristo. Para los israelitas, Dios es el único, que puede actuar como Amo absoluto de la historia humana; cualquier otro ser, que pretenda arrogarse tal poder, cometería un sacrilegio (Mt 20,1-2.8). Con todo, el actuar de Dios nunca va contra la justicia social, sino que la presupone y trata de llevarla a plenitud.
• Los varios turnos de contratados o apalabrados. A los primeros grupos se les promete un jornal justo; a los últimos ni siquiera se les habla del pago, porque no pueden aspirar a un verdadero salario (Mt 20,3-7).
• El jornal completo comenzando por los últimos. El sueldo completo de un día simboliza la soberana bondad del dueño de la viña. El pago se inicia por los últimos contratados, para describir mejor las murmuraciones de los otros jornaleros y resaltar la actitud del dueño (Mt 20,8-10).
• Diálogo entre el dueño y quienes murmuran. La generosidad del dueño de la viña, especialmente para con los últimos trabajadores, da la nota característica de esta comparación literaria (Mt 20,11-15).
La frase final de la parábola resume su mensaje: Los últimos, que pasan a ser los primeros, son los trabajadores de las cinco de la tarde, ya que son los primeros en experimentar la bondad del dueño de la viña (Mt 20,16). Así la bondad de Dios se convierte, para los creyentes, en la fuente más poderosa, que irriga el sentido de la vida.
c) Leer la Biblia agradeciendo la gratuidad de Dios
Primero, ubicar el mensaje del texto.
Después, agradecer al Señor porque nos ama y nos invita a vivenciar su Palabra.
d) Los méritos y la gratuidad en nuestra religiosidad
A veces, en nuestra religiosidad, se piensa que Dios queda obligado a darnos lo que pedimos si realizamos determinadas obras buenas. Esta es una mentalidad religiosa comercial o mercantil.
Cuando descubrimos que la medida de Dios es el amor, se comienza a purificar su imagen en nosotros. Él es absolutamente gratuito.
† PARA LA REFLEXIÓN
1. ¿Cuál es la situación de la gente de entonces?
2. ¿Qué necesitas aclarar en el texto?
3. ¿Cuál es la intuición básica de la parábola?
4. ¿Me preocupo más de los méritos que de experimentar la gratuidad de Dios?
5. ¿Qué lecciones sacas de este trozo bíblico?
En el mismo trozo del Evangelio, los operarios de la última hora son los pecadores y los paganos. Jesús trata con ellos, pues desea que palpen la bondad soberana de Dios Padre.
Esta actitud de Cristo causa escándalo, conflictos y murmuraciones entre los fariseos y los maestros de la ley. Se llenan de envidia y rabia, porque la gente sigue al Señor. Sus malos ojos y el rencor los impulsarán un día a crucificar a Jesús.
b) Contenido
La parábola está construida con cuatro imágenes ilustrativas:
• La autoridad soberana del dueño de la viña. El dueño representa a Dios; el capataz es figura de Cristo. Para los israelitas, Dios es el único, que puede actuar como Amo absoluto de la historia humana; cualquier otro ser, que pretenda arrogarse tal poder, cometería un sacrilegio (Mt 20,1-2.8). Con todo, el actuar de Dios nunca va contra la justicia social, sino que la presupone y trata de llevarla a plenitud.
• Los varios turnos de contratados o apalabrados. A los primeros grupos se les promete un jornal justo; a los últimos ni siquiera se les habla del pago, porque no pueden aspirar a un verdadero salario (Mt 20,3-7).
• El jornal completo comenzando por los últimos. El sueldo completo de un día simboliza la soberana bondad del dueño de la viña. El pago se inicia por los últimos contratados, para describir mejor las murmuraciones de los otros jornaleros y resaltar la actitud del dueño (Mt 20,8-10).
• Diálogo entre el dueño y quienes murmuran. La generosidad del dueño de la viña, especialmente para con los últimos trabajadores, da la nota característica de esta comparación literaria (Mt 20,11-15).
La frase final de la parábola resume su mensaje: Los últimos, que pasan a ser los primeros, son los trabajadores de las cinco de la tarde, ya que son los primeros en experimentar la bondad del dueño de la viña (Mt 20,16). Así la bondad de Dios se convierte, para los creyentes, en la fuente más poderosa, que irriga el sentido de la vida.
c) Leer la Biblia agradeciendo la gratuidad de Dios
Primero, ubicar el mensaje del texto.
Después, agradecer al Señor porque nos ama y nos invita a vivenciar su Palabra.
d) Los méritos y la gratuidad en nuestra religiosidad
A veces, en nuestra religiosidad, se piensa que Dios queda obligado a darnos lo que pedimos si realizamos determinadas obras buenas. Esta es una mentalidad religiosa comercial o mercantil.
Cuando descubrimos que la medida de Dios es el amor, se comienza a purificar su imagen en nosotros. Él es absolutamente gratuito.
† PARA LA REFLEXIÓN
1. ¿Cuál es la situación de la gente de entonces?
2. ¿Qué necesitas aclarar en el texto?
3. ¿Cuál es la intuición básica de la parábola?
4. ¿Me preocupo más de los méritos que de experimentar la gratuidad de Dios?
5. ¿Qué lecciones sacas de este trozo bíblico?
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