X DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO - CICLO A: Lectio Divina

“Claves para Lectio Divina para jóvenes”
Proyecto Lectionautas
CEBIPAL/CELAM – SOCIEDADES BIBLICAS UNIDAS
Hno. José Antonio Chavarría, frp; Hno. Ricardo Grzona, frp

TEXTO BÍBLICO Mateo 9, 9-13 Jesús llama a Mateo

9 Cuando Jesús salió de allí, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado cobrando impuestos para el gobierno de Roma. Entonces Jesús le dijo: «Sígueme».
Mateo se levantó y lo siguió.
10 Ese mismo día, Jesús y sus discípulos fueron a comer a casa de Mateo. Allí también estaban comiendo otros cobradores de impuestos y gente de mala fama. 11 Cuando algunos fariseos vieron a toda esa gente, les preguntaron a los discípulos: — ¿Por qué su maestro come con cobradores de impuestos y con pecadores? 12 Jesús oyó lo que decían los fariseos y les dijo:
—Los que necesitan del médico son los enfermos, no los que están sanos. 13 Mejor vayan y traten de averiguar lo que Dios quiso decir con estas palabras:
“Prefiero que sean compasivos con la gente, y no que me traigan ofrendas”. Yo vine a invitar a los pecadores para que sean mis discípulos, no a los que se creen buenos.

1 - LECTURA ¿Qué dice el texto?

Pistas para la lectura
Hola Lectionautas, cada Domingo tenemos la dicha y bendición de escuchar y estudiar las sagradas páginas de las escrituras bíblicas, las mismas que nos conducen al encuentro verdadero con Jesús nuestro maestro.
Hoy la Liturgia nos propone el texto de la Vocación de Mateo, empecemos juntos esta Lectio Divina con un espíritu dócil a la escucha atenta de la Buena Nueva. El llamado de Mateo es muy controversial debido a la función que desempeñaba este, él era un recaudador de Impuestos.
Debemos hacer notar que los cobradores de impuestos no eran queridos por el pueblo judío y eran considerados como ladrones y colaboradores de Roma. Los que eran cobradores eran excluidos de la vida social y religiosa del pueblo, debido a que eran vistos como pecadores.
Los actos de Jesús siempre fueron muy controversiales, sino recordemos las curaciones del sábado o la controversia que hubo con el tema del ayuno (Mateo 9, 14-17) y así muchas veces más los actos de Jesús causaron mucha controversia a los fariseos.
Y siguiendo así con estas situaciones de controversia nuevamente Jesús va a escandalizar a los fariseos cuando entrando a la casa de Mateo se sienta a comer con los que eran considerados personas de mala fama para, así como nos lo dirá el texto (Versículo 10b): Allí también estaban comiendo otros cobradores de impuestos y gente de mala fama.
Ante esta situación, los fariseos que siempre buscaban la manera de encontrar error en los actos de Jesús le preguntaran a los discípulos(Versículo 11b): ¿Por qué su maestro come con cobradores de impuestos y con pecadores? Ya es de nuestro conocimiento el tipo de vida de fe del pueblo judío. Para estos lo más importante era cumplir con la doctrina y las leyes, sin importar tanto la buena vida interior que pudiesen tener y por eso hacen esa pregunta, porque tener algún tipo de relación con este tipo de personas
estaba en contra de sus leyes y doctrinas.
Pero Jesús que conoce sus corazones al escucharlos les dirá: Los que necesitan del médico son los enfermos, no los que están sanos (Versículo 12). Este es el ejemplo que usa Jesús para hablar de la Conversión, comparando la enfermedad del cuerpo con la enfermedad del alma, así compara al pecado con la enfermedad a la que están sometidos los que no le conocen, los que
escuchan pero no ponen en práctica sus enseñanzas.
Era necesario para esto que una persona no bien vista a los ojos de los que estaban ahí fuera llamada por Él reafirmando así que Él vino a cambiar, vino a convertir toda ley que no fuera la ley de su Padre. Y aquí es donde encontramos el sentido del llamado Mateo, uno que era considerado pecador, siendo su llamado una enseñanza preciosa sobre la verdadera conversión. El simbolismo de compartir la mesa con los recaudadores de impuestos y las personas de mala fama, tiene también una enseñanza sobre la igualdad, de cómo ante los ojos de Dios no hay diferencia entre las personas, Dios no hace separaciones sobre quienes son invitados a compartir la mesa con Él. Pero Jesús no se queda ahí sino que les dice: 13 Mejor vayan y traten de averiguar lo que Dios quiso decir con estas palabras: “Prefiero que sean compasivos con la gente, y no que me traigan ofrendas”. Esto mismo ya se había escrito en el libro de Oseas (Oseas 6, 6)
Queridos amigos y amigas lectionautas estas palabras dichas por Jesús nos dejan una enseñanza maravillosa sobre la verdadera conversión del discípulo de Jesús. Reafirmando que de nada sirve una vida de fe basado en el culto y en las ofrendas si esa vida no se refleja con actos de amor hacia las demás personas, por eso el pone el ejemplo de la compasión, e invita a los que les escuchen a ser compasivos y a no vivir de una fe de palabras.
Lo mismo cuando dijo: sus labios me adoran pero su corazón está lejos de mí, (Mateo 5, 8) enseñando así que LA FE SIN OBRAS NO SIRVE DE NADA y además de eso este tipo de fe no agrada a Dios (Ver carta de Santiago 2, 14-26). Haciendo de esta forma al final del texto un énfasis especial en la importancia de la humildad de quien es llamado, cuando dice
(Versículo 13b): Yo vine a invitar a los pecadores para que sean mis discípulos, no a los que se creen buenos. Enseñando como el verdadero discípulo de Jesús es aquel que al ser llamado reconoce que es enfermo, se reconoce como pecador, pero que luego se convierte de su situación de pecado, y sobre todo que este debe demostrar esta conversión con sus obras.
Para tener presente: En otros Evangelios, Mateo aparecerá con el nombre de Leví. Otros textos bíblicos para confrontar: Mc 2, 13-17; Lc 5, 27-32; Os 6, 6. Para proseguir la profundización de estos temas se puede mirar en La Biblia de Estudio. Dios habla hoy, la voz: Conversión

Preguntas para la lectura
•¿Cuál era el trabajo que desarrollaba Mateo?
•¿Cómo eran considerados los recaudares de impuestos?
•¿Con quienes se sienta a comer Jesús?
•¿Cuál es la pregunta que hacen los fariseos a los discípulos de Jesús?
•Ante los cuestionamientos de los fariseos. ¿Cuál es la respuesta de Jesús?
•¿A qué invita Jesús a los fariseos? ¿Qué les manda que averigüen?
•¿Quiénes son los invitados a ser discípulos de Jesús?

2 - MEDITACIÓN ¿Qué me dice? ¿Qué nos dice?

Preguntas para la meditación
Ante este texto tan importante, debo preguntarme:
•Jesús hoy me invita a seguirle ¿He sido capaz de renunciar a mi vida y dejar mi pecado para seguirle?
•O quizás ¿He dicho SI al llamado que me hace Jesús para ser su discípulo?
•Como discípulo de Jesús ¿Demuestro mi fe con obras o me quedo nada mas con palabras y actos de religiosidad?
•¿Soy capaz de convertir mi vida a una vida nueva en la persona de Jesús, escuchando su palabra y realizando su voluntad?
•¿Trato que cada uno de mis actos sea un testimonio de discipulado de Jesús?
•En mi discipulado, ¿Me preocupo por realizar obras de amor hacia mis hermanos?
•¿Me he considerado muchas veces bueno, sin reconocer la necesidad de ser sanado por el Señor?
•¿He juzgado alguna vez a alguna persona de mi comunidad por el tipo de vida que lleva, creyéndome mejor que él o ella?
•¿Me jacto de ser un buen cristiano y me olvido de amar a mis hermanos?
•¿Es Jesús el modelo de mi discipulado?

3 - ORACIÓN ¿Qué le digo? ¿Qué le decimos?

La oración es la respuesta que le damos a Dios que se nos manifiesta primero.
Señor, cada vez que leo y oro con tu palabra me encuentro que eres tú quien lee mi vida, tú me lees a mi Señor y mi vida se encuentra como un libro abierto delante de ti y así me enseñas a recocer mi verdad.
No quiero Señor negarme al llamado que me haces, quiero seguirte sin miedo Señor, tus palabras cuestionan mi vida y hoy siento que me invitan a ser una persona diferente. Quiero ser sanado por ti Señor, quiero que cures mi corazón, que cures mi alma, muchas veces he dejado que mi vanidad y mi soberbia no me dejen ver con claridad lo que quieres de mi Señor, pero hoy he comprendido que lo único que deseas es que me convierta, que lo único que me pides es que testifique con mi vida que tú estás conmigo Señor. Hoy quiero dejarme guiar por ti Señor y empezar a vivir según tus mandamientos, quiero llevar mi fe como un testimonio fervoroso de tu amor.
Te pido Señor que me perdones por no reconocer muchas veces mis errores y por creer que soy mejor que otros, haz de mi Señor un verdadero discípulo tuyo, imitándote en todo, y luchando cada día para parecerme más a ti Señor.
Amén.

4 - CONTEMPLACIÓN ¿Cómo interiorizo el mensaje? ¿Cómo interiorizamos el mensaje?

Te invitamos que puedas interiorizar este mensaje de
Jesús, repitiendo varias veces el salmo 51(50).

51 (50) Perdóname, Dios mío
(1-2) David compuso este salmo después de que tuvo relaciones sexuales con
Betsabé. El profeta Natán lo reprendió por haber cometido adulterio.
Dios mío,
tú eres todo bondad,
ten compasión de mí;
tú eres muy compasivo,
no tomes en cuenta mis pecados.
¡Quítame toda mi maldad!
¡Quítame todo mi pecado!
Sé muy bien que soy pecador,
y sé muy bien que he pecado.
A ti, y sólo a ti
te he ofendido;
he hecho lo malo,
en tu propia cara.
Tienes toda la razón
al declararme culpable;
no puedo alegar
que soy inocente.
Tengo que admitir
que soy malo de nacimiento,
y que desde antes de nacer
ya era un pecador.
Tú quieres que yo sea sincero;
por eso me diste sabiduría.
Quítame la mancha del pecado,
y quedaré limpio.
Lava todo mi ser,
y quedaré más blanco que la nieve.
Ya me hiciste sufrir mucho;
¡devuélveme la felicidad!
No te fijes en mi maldad
ni tomes en cuenta mis pecados.
Dios mío,
no me dejes tener
malos pensamientos;
cambia todo mi ser.
No me apartes de ti;
¡no me quites tu santo espíritu!
Dame tu ayuda y tu apoyo;
enséñame a ser obediente,
y así volveré a ser feliz.
A los pecadores les diré
que deben obedecerte
y cambiar su manera de vivir.
Señor y Dios mío,
Dios de mi salvación,
líbrame de la muerte,
y entre gritos de alegría
te daré gracias
por declararme inocente.
Abre mis labios
y te cantaré alabanzas.
Yo con gusto te ofrecería
animales para ser sacrificados,
pero eso no es lo que quieres;
eso no te complace.
Para ti,
la mejor ofrenda es la humildad.
Tú, mi Dios, no desprecias
a quien con sinceridad
se humilla y se arrepiente.

5 - ACCIÓN ¿A qué me comprometo? ¿A qué nos comprometemos?

Propuestas personales
•Realiza en el transcurso de la semana un acto de misericordia con alguna persona que esté pasando una necesidad, puede ser visitar a un enfermo o dar de comer a algún hambriento o cualquier gesto de amor para con los
demás.
•En una hoja de papel escribe las obras de amor o caridad que realizas y cuestiónate si realmente son suficientes o si podrías realizar más. Escribe las obras que has hecho este último mes.

Propuestas comunitarias
•Programar un apostolado de grupo llevando ayuda a personas que lo necesiten, obteniendo los medios desde dentro del grupo, buscando la ayuda desde los mismos integrantes.
•Que estas obras sean para afirmar un proceso de ser Discípulos y Misioneros de Jesús.