“Hablar hoy de Dios en la escuela agustiniana“ fue el tema de la XIV Aula agustiniana, celebrada hace unos días en Madrid. Hoy presentamos un curioso documento que puede animarnos a acomodar la Palabra a nuestra vida.
Mª Fe Ramos durante su conferencia
La adaptación y el acercamiento de la Palabra de Dios a las circunstancias en que vivimos es tarea y reclamo permanente en la vida de la Iglesia.
Mª Fe Ramos, conocida por sus conferencias y orientaciones sobre la Biblia, participó en la XVI Aula agustiniana, donde relató la experiencia de un profesor de religión, que de algún modo es también su experiencia, pues ella es también profesora de religión en la escuela pública.
Como ejemplo del trabajo, o mejor de la experiencia de acercamiento a la palabra de Dios, que tiene con sus alumnos Mª Fe compartió con los asistentes, la adaptación que uno de ellos, Daniel Muñoz, hizo de la parábola del Hijo pródigo. Este es el relato en vivo:
“Un padre tenía dos hijos: uno era del Barça y otro del Madrid. Repartió su fortuna entre los dos. Días después, el del Barça decidió que el dinero lo iba a gastar en entradas para ver al Barça y en hacer gamberradas.
Cuando acabó la temporada, el chico del Barça estaba destrozado porque el Barça había bajado a 2ª división. Entonces, un aficionado del Español le dijo que si quería trabajar limpiando los asientos del Montjuic. Le entraban ganas de comer, viendo los restos de comida que había en los asientos. ¡¡Tenía tanta hambre!!
Y pensó: “Si yo me hubiera hecho del Madrid, no estaría tan mal y no habría gastado tanto dinero en gamberradas, porque la gente del Madrid es muy educada. Me pondré en camino hacia el Santiago Bernabéu, donde está mi padre y le diré: “Perdóname, papá, he pecado contra ti, ya no merezco ser hijo tuyo. Trátame como a uno del Barça”.
Se fue hacia el Bernabéu, agarró a su padre por la bufanda del Real Madrid y le besó. Le dijo:
- “Padre, he pecado contra el Madrid y contra ti, ya no merezco ser hijo tuyo”.
Pero el padre dijo:
- “Sacad el mejor traje del Madrid, ponedle una bufanda y unas botas Adidas, porque este hijo mío estaba muerto y ha revivido, era del Barça y se ha hecho del Madrid”.
Conclusión: El perdón es una cosa muy importante, porque una persona se puede equivocar y hay que darle una segunda oportunidad, porque si no se la das podría volver a hacerlo a otra persona y si se la das podría reflexionar”.
Daniel Muñoz, 12 años
Mª Fe Ramos durante su conferencia
La adaptación y el acercamiento de la Palabra de Dios a las circunstancias en que vivimos es tarea y reclamo permanente en la vida de la Iglesia.
Mª Fe Ramos, conocida por sus conferencias y orientaciones sobre la Biblia, participó en la XVI Aula agustiniana, donde relató la experiencia de un profesor de religión, que de algún modo es también su experiencia, pues ella es también profesora de religión en la escuela pública.
Como ejemplo del trabajo, o mejor de la experiencia de acercamiento a la palabra de Dios, que tiene con sus alumnos Mª Fe compartió con los asistentes, la adaptación que uno de ellos, Daniel Muñoz, hizo de la parábola del Hijo pródigo. Este es el relato en vivo:
“Un padre tenía dos hijos: uno era del Barça y otro del Madrid. Repartió su fortuna entre los dos. Días después, el del Barça decidió que el dinero lo iba a gastar en entradas para ver al Barça y en hacer gamberradas.
Cuando acabó la temporada, el chico del Barça estaba destrozado porque el Barça había bajado a 2ª división. Entonces, un aficionado del Español le dijo que si quería trabajar limpiando los asientos del Montjuic. Le entraban ganas de comer, viendo los restos de comida que había en los asientos. ¡¡Tenía tanta hambre!!
Y pensó: “Si yo me hubiera hecho del Madrid, no estaría tan mal y no habría gastado tanto dinero en gamberradas, porque la gente del Madrid es muy educada. Me pondré en camino hacia el Santiago Bernabéu, donde está mi padre y le diré: “Perdóname, papá, he pecado contra ti, ya no merezco ser hijo tuyo. Trátame como a uno del Barça”.
Se fue hacia el Bernabéu, agarró a su padre por la bufanda del Real Madrid y le besó. Le dijo:
- “Padre, he pecado contra el Madrid y contra ti, ya no merezco ser hijo tuyo”.
Pero el padre dijo:
- “Sacad el mejor traje del Madrid, ponedle una bufanda y unas botas Adidas, porque este hijo mío estaba muerto y ha revivido, era del Barça y se ha hecho del Madrid”.
Conclusión: El perdón es una cosa muy importante, porque una persona se puede equivocar y hay que darle una segunda oportunidad, porque si no se la das podría volver a hacerlo a otra persona y si se la das podría reflexionar”.
Daniel Muñoz, 12 años
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