NO DEJES DE VISITAR
GIF animations generator gifup.com www.misionerosencamino.blogspot.com
El Blog donde encontrarás abundante material de formación, dinámicas, catequesis, charlas, videos, música y variados recursos litúrgicos y pastorales para la actividad de los grupos misioneros.
Fireworks Text - http://www.fireworkstext.com
BREVE COMENTARIO, REFLEXIÓN U ORACIÓN CON EL EVANGELIO DEL DÍA, DESDE LA VIVENCIA MISIONERA
SI DESEAS RECIBIR EL EVANGELIO MISIONERO DEL DÍA EN TU MAIL, DEBES SUSCRIBIRTE EN EL RECUADRO HABILITADO EN LA COLUMNA DE LA DERECHA

miércoles, 15 de julio de 2009

Hay llamadas y llamadas

Publicado por Vocaciones Jesuitas

Lo reconozco. El está a la puerta, llamando. Lo ha estado haciendo hasta ahora y sé que lo seguirá haciendo.

Su llamada ha sido como huracán que me ha arrancado de cuajo de la tierra a la que se estaba agarrado; como terremoto que ha removido seguridades en las que estaba anclado; como fuego que ha arrasado certezas en las que estaba aferrado.

Es cierto que es huracán, terremoto y fuego, pero habitualmente se me presenta como brisa suave, imperceptible pero constante. Brisa que alivia, que reconforta sin violentar. Los que la han percibido dicen haberse sentido sobrecogidos: “al sentirla, Elías se cubrió el rostro con el manto, salió afuera y se puso en pie a la entrada de la cueva” (1 Reyes 19,13).

Dicen que como Abrahán intuyeron una promesa que los sacaba de lo suyo (Gn. 12,1-4). Afirman que los adentró, como Moisés, en el desierto (Ex.6,2-13); que ante su santidad temblaron, como Isaías, de pies a cabeza (Is.6,1-8); pero, como le sucedió a Jeremías, su atracción les sedujo (Jer.20,1-9)

Dicen como Samuel haber escuchado en el silencio de la noche una Palabra que no lograban distinguir (1 Sam 3,1-21): unos como Sara rieron incrédulos (Gn.18,1-15); hubo quienes al intuir su alcance se desearon, como Elías, la muerte (1R 19,3-9), mientras que otros huyeron como Jonás (Jo.1,1-4)

Todos ellos dicen que van aprendiendo, como María, a acoger esa brisa y van dejando que el Espíritu engendre lo inaudito: no saben cuando será plenitud. Sólo saben que no dependerá de ellos.

Dicen que esa brisa les trae el recuerdo de lo de Jesús, y sienten -no te lo sabrían explicar- que su vida está llamada a ser como la de Él: grano de trigo que muere, cae en la tierra, es sepultada y germina dando fruto. No saben cuándo será. Sólo saben que no dependerá de ellos.

Esta experiencia, me digo, sigue sucediendo. El sigue a la puerta, llamando.

No hay comentarios: