Monseñor Melani: Otra víctima de la Intolerancia Vaticana

Publicado por Río Negro, VR y La Nación

El prefecto para la Congregación de los Obispos, cardenal Giovanni Battista Re, le "sugirió" al obispo neuquino Marcelo Melani que renuncie al gobierno pastoral de la diócesis ante las quejas recibidas en la Santa Sede sobre cuestiones teológicas y litúrgicas. El planteo fue hecho en marzo último y lo reveló el párroco de Centenario, sacerdote Rubén Capitanio, ex secretario del primer prelado neuquino, Jaime de Nevares.

"La sugerencia existió" dijo el sacerdote, pero aclaró que no fue un pedido de renuncia porque sólo las puede pedir el Papa o un cardenal en su nombre. El cardenal que habló con Melani, aclaró Capitanio, lo hizo por su cuenta.

Melani estuvo en el Vaticano en marzo junto a otros obispos argentinos cumpliendo con la visita "ad límina". Las quejas sobre la diócesis de Neuquén fueron por "imprecisiones teológicas" y "abusos litúrgicos".

Entre los considerados "abusos litúrgicos" cuestionados a Melani se mencionan faltas a disposiciones del ritual de las ceremonias religiosas, como que los sacerdotes no se revistan debidamente (con alba blanca, estola y casulla), delegar la distribución de la comunión en laicos y ellos se sumen a las filas de los fieles o que, habiendo hostias, consagren panes. La principal objeción a su postura teológica es la escasa diferenciación en el interior de la Iglesia entre jerarquía y feligresía.

Sacerdotes, religiosas, diáconos y agentes de pastoral dieron su respaldo al obispo de Neuquén, Marcelo Melani, en una carta abierta que le enviaron a fines de abril, tras una reunión realizada en Zapala donde se analizó la queja que llegó al Vaticano sobre el funcionamiento de la diócesis local.

"Queremos manifestarle nuestro sincero e incondicional apoyo, que expresamos con nuestras oraciones y acompañamiento en este momento", dice la carta del 27 de abril en el último párrafo. Agrega que "queremos pedirle disculpas a usted y a todos nuestros hermanos si como pastores, sacerdotes, religiosos o agentes de pastoral, hemos hecho sufrir a alguien con nuestras actitudes".

Melani recibió dos quejas sobre la diócesis que dirige cuando visitó el Vaticano en marzo último junto a otros obispos de la Argentina. El planteo fue por abusos litúrgicos e imprecisiones teológicas y se los hizo conocer el cardenal Giovanni Battista Re, Prefecto de la Congregación para los Obispos y Presidente de la Pontificia Comisión para América Latina.

Lo mismo piensan en la Embajada Argentina ante la Santa Sede en Roma. "No tenemos información oficial, pero, por lo que sabemos, las causas no son lo suficientemente graves", dijo un hombre del entorno del embajador Juan Pablo Cafiero, quien tiene, según cita el diario La Nación, un "muy buen concepto de Melani".

"En este tiempo de preparación, a los 50 años de nuestra diócesis y en comunión con toda la Iglesia, queremos agradecer públicamente a Dios por los obispos Don Jaime (De Nevares), Don Agustín (Radrizzani) y Don Marcelo que nos han acompañado en la vida, las luchas y el camino como Iglesia local ", dicen los integrantes de la comunidad religiosa en el documento enviado al obispo neuquino. Le agradecen a Melani la "libertad y confianza" otorgada a sacerdotes, religiosas y diáconos "para ir creciendo en el servicio a nuestra Iglesia de Neuquén".

"La Iglesia somos todas y todos aquellos y aquellas que profesamos la fe en Cristo resucitado y nos sentimos pertenecientes a la Iglesia Católica, Apostólica y Romana. Formada por hombres y mujeres que cometemos errores y somos diferentes en nuestros modos de expresar la fe".

"Y justamente la diversidad es la que hace la riqueza en nuestra unidad", agregan los sacerdotes en el documento de respaldo al obispo.

"Pedimos a Dios, e invitamos a pedir, que sepamos respetar las diferencias, verlas como riqueza y hacer uso de la corrección fraterna cuando creemos necesario. Deseamos que todos y todas conozcan la búsqueda de la verdad, de la fraternidad y de la unidad de la iglesia diocesana", concluyen.

En Neuquén, una diócesis habituada a un estilo pastoral más cercano a la teología de la liberación, no recuerdan antecedentes de un reclamo como el de ahora. Ni siquiera cuando a una imagen de la Virgen María se le colocó un pañuelo de las Madres de Plaza de Mayo en el barrio San Lorenzo, en tiempos de la dictadura militar, cuando Jaime De Nevares estaba al frente de esa diócesis.