Publicado por Cipecar
Lunes, 19 de julio
“Ellos se convirtieron con la predicación de Jonás, y aquí hay uno que es más que Jonás” (Mt 12,41)
A veces los que no creyentes son mejores que los que se precian de ser fieles a Dios. No basta que el agua rodee la piedra, hace falta que penetre en su corazón para que sienta la humedad por dentro. Intenta aprender de todos los que viven a tu alrededor, también de los que han abandonado la práctica religiosa.
Todos son señales de tu amor, cuando miro la vida con ojos limpios. Ninguna señal me basta, cuando tengo el corazón cerrado.
Martes, 20 de julio
“El que cumple la voluntad de mi Padre del cielo, ése es mi hermano y mi hermana y mi madre” (Mt 12,50)
La nueva familia de Jesús está abierta a la humanidad entera. Con los que se aceptan un compromiso semejante al suyo, Jesús estrecha lazos de intimidad. Pregúntate cuál es tu relación con los miembros de tu comunidad cristiana? ¿Los sientes como hermanos y hermanas?
Cuando hago mías voces que antes no lo eran, cuando miro con simpatía a los que encuentro en el camino, mi corazón se va pareciendo al tuyo, Señor.
Miércoles, 21 de julio
“Salió el sembrador a sembrar” (Mt 13,3)
La Palabra nos presenta el rostro glorioso de Jesús, que sigue saliendo a sembrar su amor a la humanidad con la ilusión de un sembrador. Prepárate con el silencio para la escucha de la Palabra. Prepárate con la soledad para la comunión con Jesús.
Abro mi corazón a tu semilla, Señor, y me quedo a la espera de que florezca.
Jueves, 22 de julio
SANTA MARÍA MAGDALENA
“Jesús le dice: ¡María! Ella se vuelve y le dice: ¡Rabboni!, que significa: ¡Maestro!” (Jn 20,16)
- Jesús llama a María por su nombre y ella reconoce su voz. Al esposo le responde la esposa. El lenguaje nupcial expresa la relación de amor que une a la comunidad con Jesús. ¿Cómo llamas a Jesús en tus encuentros con Él?
Lo mío es tuyo, mi Señor. Lo tuyo es mío, mi Señor. Juntos hacemos el camino, mi corazón en el tuyo.
Viernes, 23 de julio
“Vosotros oíd lo que significa la parábola del sembrador” (Mt 13,18)
Jesús invita a todos a acoger el Evangelio y a no dejar que la Buena Noticia de la Salvación la ahoguen las dificultades y entretenimientos de este mundo pasajero. Prepara tu tierra para que la semilla del Reino de fruto en tu vida.
Siembra en mi interior, Señor, la semilla de tu Gracia. Riégala con el agua de tu Amor. Abre mi corazón para ofrecerla a los hermanos.
Sábado, 24 de julio
“¿Quieres que vayamos a arrancar la cizaña?” (Mt 13,28)
Dios ve lo malo que hay en las personas, pero su corazón es respetuoso y no arranca la cizaña. Une tus deseos de justicia con el evangelio de la misericordia. No dejes que la verdad sin amor te haga duro de corazón.
Dame tus ojos, Señor, para que ver el mundo como Tú lo ves. Dame tu corazón, Señor, para amar a las gentes como Tú las amas.
“Ellos se convirtieron con la predicación de Jonás, y aquí hay uno que es más que Jonás” (Mt 12,41)
A veces los que no creyentes son mejores que los que se precian de ser fieles a Dios. No basta que el agua rodee la piedra, hace falta que penetre en su corazón para que sienta la humedad por dentro. Intenta aprender de todos los que viven a tu alrededor, también de los que han abandonado la práctica religiosa.
Todos son señales de tu amor, cuando miro la vida con ojos limpios. Ninguna señal me basta, cuando tengo el corazón cerrado.
Martes, 20 de julio
“El que cumple la voluntad de mi Padre del cielo, ése es mi hermano y mi hermana y mi madre” (Mt 12,50)
La nueva familia de Jesús está abierta a la humanidad entera. Con los que se aceptan un compromiso semejante al suyo, Jesús estrecha lazos de intimidad. Pregúntate cuál es tu relación con los miembros de tu comunidad cristiana? ¿Los sientes como hermanos y hermanas?
Cuando hago mías voces que antes no lo eran, cuando miro con simpatía a los que encuentro en el camino, mi corazón se va pareciendo al tuyo, Señor.
Miércoles, 21 de julio
“Salió el sembrador a sembrar” (Mt 13,3)
La Palabra nos presenta el rostro glorioso de Jesús, que sigue saliendo a sembrar su amor a la humanidad con la ilusión de un sembrador. Prepárate con el silencio para la escucha de la Palabra. Prepárate con la soledad para la comunión con Jesús.
Abro mi corazón a tu semilla, Señor, y me quedo a la espera de que florezca.
Jueves, 22 de julio
SANTA MARÍA MAGDALENA
“Jesús le dice: ¡María! Ella se vuelve y le dice: ¡Rabboni!, que significa: ¡Maestro!” (Jn 20,16)
- Jesús llama a María por su nombre y ella reconoce su voz. Al esposo le responde la esposa. El lenguaje nupcial expresa la relación de amor que une a la comunidad con Jesús. ¿Cómo llamas a Jesús en tus encuentros con Él?
Lo mío es tuyo, mi Señor. Lo tuyo es mío, mi Señor. Juntos hacemos el camino, mi corazón en el tuyo.
Viernes, 23 de julio
“Vosotros oíd lo que significa la parábola del sembrador” (Mt 13,18)
Jesús invita a todos a acoger el Evangelio y a no dejar que la Buena Noticia de la Salvación la ahoguen las dificultades y entretenimientos de este mundo pasajero. Prepara tu tierra para que la semilla del Reino de fruto en tu vida.
Siembra en mi interior, Señor, la semilla de tu Gracia. Riégala con el agua de tu Amor. Abre mi corazón para ofrecerla a los hermanos.
Sábado, 24 de julio
“¿Quieres que vayamos a arrancar la cizaña?” (Mt 13,28)
Dios ve lo malo que hay en las personas, pero su corazón es respetuoso y no arranca la cizaña. Une tus deseos de justicia con el evangelio de la misericordia. No dejes que la verdad sin amor te haga duro de corazón.
Dame tus ojos, Señor, para que ver el mundo como Tú lo ves. Dame tu corazón, Señor, para amar a las gentes como Tú las amas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario